¿Sánchez Gordillo es el Caballero Oscuro?

De la última película de Christopher Nolan, ‘El Caballero Oscuro, la leyenda renace’, se han escrito ya cientos de ensayos. No les exagero. Algunos, quizás la mayoría, sobre la ideología política y filosófica que dibuja el director a lo largo del film. De todos los artículos que he leído, el que más me ha gustado lo encontré en el muy recomendable blog de cine ‘Las horas perdidas’. Venía a decir, les resumo, que había una lectura de la película un tanto dictatorial, en la que el pueblo, Gotham, nosotros, somos una masa descabezada y sin iniciativa que dejamos hacer a los que se proclaman buenos y malos, indistintamente. Una especie de mensaje tipo: “la crisis económica y financiera es un asco, el mundo es un asco, pero nadie hace nada, así que mejor quedarnos quietos, esperando que nos digan lo que hay que hacer”.

Ayer, mientras veía a Sánchez Gordillo arengando a sus seguidores con la amenaza de que iba a tomar un Corte Inglés de Jaén, me vinieron a la cabeza varias escenas de la película de Nolan (salvando las muchas y sobre todo estéticas diferencias del asunto). Y, pese a lo absurdo e innecesario, me hice la pregunta: “¿Se habrá inspirado Sánchez Gordillo en ‘El Caballero Oscuro’?”

La sola idea de Gordillo embutido en un traje de neopreno, con la barba escapando por debajo de la máscara, ya justificó la reflexión. Y unas risas. El caso es que empecé imaginando al alcalde de Marinaleda aquella mañana, en su casa, pensando: “¿Qué haría Batman en mi situación? Hmmm… Ya sé, los rescataría a todos. Sí, eso: voy a desmantelar un supermercado. Por principios”.

Unos segundos más tarde, recreando la escena con la banda de justicieros arramblando y la cajera rompiendo a llorar, me invadió la duda: “¿Se inspira en Batman o en Bane?” A fin de cuentas, Bane es un ferviente defensor de unos ideales que decide generar una revolución para establecer un nuevo orden en Gotham. Y entonces llegué a la pregunta por la que, tal vez, mereció la pena esta extraña reflexión: ¿Qué diferencia hay entre luchar por unos ideales y tomarse la justicia por la mano?

Qué locura. Parece una broma macabra sacada de la cabeza del Joker.