Tom Hardy, Charles Bronson

Charles Bronson y Tom Hardy. Lo más probable es que el primer nombre les sugiera un bigote con sombrero buscando bronca. El segundo, quizás, no les diga nada. Pero la explosiva combinación de ambos me ha confirmado una sospecha: estamos ante un actorazo que dará mucho de qué hablar. Tom Hardy es uno de los pocos ingleses -comparado con la ingente cantidad de actores que no consigue salir de la isla- que disfrutará las mieles de Hollywood en todo su esplendor. Le conocen, aunque, como les decía, puede que no lo sepan: ‘Rock´n Rolla’, ‘Layer Cake’ y, claro, ‘Origen’.

Me fío de Christopher Nolan. No solo considero que es uno de los directores más creativos del cine contemporáneo, sino que, además, ha sabido cosechar un círculo de amistades muy fiel. Sus intérpretes han ido de una a otra historia, dejándose guiar por su mano: Christian Bale, Joseph Gordon-Lewitt, Ken Watanabe, Michael Cane, DiCaprio, Jackman… Todos forman una especie de ‘club de privilegiados’ que vuelven una y otra vez a los mundos de Nolan. El último en llega, Tom Hardy.

Después de su incursión en el mundo de los sueños y las peonzas infinitas, Hardy será ‘Bane’, uno de los enemigos de Batman en ‘The Dark Knight Rises’. El personaje es un amasijo de músculos, una bestia bruta que, en los cómics, rompió la espalda del héroe de Gotham. Los fans, alarmados ante la noticia, se echaron las manos a la cabeza: “¡Pero si es demasiado pequeño!”

A todos ellos les recomiendo que vean ‘Bronson’ (2008), la historia real del preso más caro de la historia del Reino Unido, conocido por todos bajo el pseudónimo de Charles Bronson. En serio, hace un papel espectacular: violento, enorme y, de una manera bizarra, entrañable. La película, por cierto, no llegó a estrenarse en España.