Sherlock Holmes (I)

Sherlock Holmes es un detective de lo más singular, sigue cualquier pista hasta dar en el clavo. Sherlock Holmes, es el único y genial. Con su lupa, con su pipa y con su gabán es inconfundible, el terror de los cacos. Sherlock Holmes, como él, no hay otro igual”. Esta poesía modernista de los siempre recurrentes e inspiradores ‘Parchis’ (chavales, Parchis: grupo musical integrado por seis niños que cantaban canciones chachis y actuaban en películas felices que hoy no tendrían ningún éxito y que los más frikis ochenteros las guardan como trofeos culturales. Pero vamos, que ahí tenéis Google y Youtube para formaros en el folclore español) servía de banda sonora al anime japonés Sherlock Holmes. Una de esas series de dibujos animados -cuando las mañanas y las sobremesas de la televisión aún no habían sido infectadas con corazones podridos y telenovelas baratas- que todos recordamos con cariño (junto a Willy Fox, Marco, Heidi, etc).

Mal que pese al sistema educativo español, para mí, como para tantos otros, la primera vez que me presentaron al personaje de Arthur Conan Doyle tenía orejas, hocico y rabo. El perro, pese a ser inglés y tomar té a las cinco, no era el original. Pero me encantaba. Unos años después me lo volví a cruzar, esta vez, en una película que ponían en la televisión: ‘El secreto de la Pirámide’ (1985, Barri Levinson). Sherlock Holmes pasó entonces a ser un adolescente con aires de un nonato Harry Potter -pero con carisma- que seguía su instinto para descifrar el enigma de su colegio. Aquél tampoco era el original, pero, igualmente, me cayó simpático.

Ahora, después de un perro que hablaba y un niño que vivía en Hoggarts, nos dicen que el Sherlock Holmes más fiel a la novela no era sólo sagaz e inteligente. También un rudo, maleducado, fortalecido, alcohólico, jugador, vicioso y mujeriego inglés. O, lo que es lo mismo, un Robert Downey Jr. Así nos lo pinta Guy Ritchie (Rockanrolla) en su última aventura con un reparto que completan los guapos Jude Law y Rachel McAdams. Tengo ganas de conocer a este detective. Ya les cuento.