Star Trek 2009

La nueva saga de Star Trek es lo más parecido que una película de Star Trek puede ser a Star Trek pero sin ser Star Trek. Y por eso me encanta. El genio más que comprobado de J.J. Abrams (Perdidos, Cloverfield, Misión Imposible III), su director, sorprendió con una película que reinventaba a los personajes clásicos del Enterprise para reescribirlos como lo hubiera hecho un fanático de Star Wars.

Lo mejor de Star Trek XI es que su objetivo principal es entretener. Entretener en todas las vertientes. Divertir y dejar volar la imaginación. Desde el primer minuto de la película, con ese genial montaje de una muerte y un nacimiento en el espacio, el espectador es arrastrado a una sucesión de aventuras cuyo único problema es que tienen un final… Aunque ya está confirmada la secuela para 2011, cómo no.

Al terminar la fanfarría de los títulos de crédito estaba plenamente convencido de que acababa de disfrutar de la mejor precuela de una saga emblemática hasta la fecha. Es más que probable que si usted no ha visto ninguna película o serie de Star Trek se plantee la posibilidad de no ver esta película por aquello de “vayamos a que no me entere de nada”. Incorrecto. Abrams dirige una historia en la que los personajes empiezan de cero. Personajes tratados con decencia; ninguno cae en el olvido ni en la vagueza de “sólo estar”. Todos protagonizan su pequeña parte de la aventura, convirtiendo al primer viaje del Enterprise en una travesía coral.

Ayer salió a la venta en DVD. Si se la perdieron en el cine, esta es su oportunidad. Si no se la perdieron, también. Chris Pine, Zachary Quinto (Heroes), Eric Bana (Hulk, Troya), Zoe Saldana (la veremos en breve en Avatar), John Cho (Flash Forward) y Karl Urban (El señor de los Anillos), entre otros, ponen rostro a la tripulación del Capitán Kirk. La aparición de Leonard Nimoy (el Spock original), pone la nostalgia. Larga vida y prosperidad.