Walt Disney y Lucasfilm han anunciado el casting completo de ‘La Guerra de las Galaxias: Episodio VII‘. Los nombres son: John Boyega (Attack the Block), Daisy Ridley, Adam Driver (Lincoln), Oscar Isaac (A propósito de Llewyn Davis), Andy Serkis (El Hobbit), Domhnall Gleeson (Una cuestión de tiempo), y Max von Sydow (Tan fuerte tan cerca). Que se suman, por supuesto, a las estrellas de la saga: Harrison Ford, Carrie Fisher, Mark Hamill, Anthony Daniels, Peter Mayhew y Kenny Baker.
J. J. Abrams: «Estamos muy contentos de compartir el elenco final de ‘La Guerra de las Galaxias: Episodio VII‘. Es tan emocionante como surrealista ver a los actores originales y a estos nuevos intérpretes juntos para dar vida, una vez más, a este mundo. Empezamos a rodar en un par de semanas y todo el mundo está dando lo mejor de sí para que los fans estén orgullosos».
‘La Guerra de las Galaxias: Episodio VII‘, dirigida por J.J. Abrams, con un guión de Lawrence Kasdan y Abrams. Kathleen Kennedy, J.J. Abrams y Bryan Burk producen. John Williams pone la música. La película se estrena en todo el mundo el 18 de diciembre de 2015.
Peter Mayhew, el actor británico que interpreta a Chewbacca en la trilogía original de ‘La Guerra de las Galaxias’, viajaba desde una convención de cómics en Denver hasta su hogar Texas. Pese a sus 69 años, el que fuera el entrañable wookie y copiloto del Halcón Milenario no pasa desapercibido: mide 2,22 metros, tiene una frondosa melena rizada que ya quisiera Mario Vaquerizo y utiliza un enorme bastón con forma de espada láser. Sí. Un bastón. Con forma de espada láser. Un bastón láser.
Las fuerzas de seguridad del Aeropuerto de Denver (Transportation Security Administration, TSA) se quedaron de piedra al ver al hombre acercarse a la puerta de embarque. «Señor -le dijeron-, tenemos que confiscar ese…bueno…ese…bastón». Mayhew, consternado, les explicó que lo necesitaba para caminar, que no era más que un bastón con la forma del arma más representativa de la historia de la ciencia ficción. Nada más.
Los agentes insistieron y, efectivamente, le retiraron el bastón ya que podría utilizarse como una arma en pleno vuelo, cual Sith enfurecido por una Orden 66 en la reunión anual de miembros de la familia Skywalker. Nuestro querido gigante mostró su repulsa, subrayó lo ridículo de la situación y, finalmente, optó por rugir. Rugir, metafóricamente hablando, claro. Sacó el móvil y escribió el siguiente tuit:
«Hombre gigante necesita bastón gigante… un bastón pequeño es como un palillo de dientes… Además, mi bastón-sable-láser es genial. Lo echaré de menos» («Giant man need giant cane… small cane snap like toothpick… besides… my light saber cane is just cool… I would miss it…», @TheWookieeRoars).
Unos minutos después del tuit -y varios cientos de retuiteos y comentarios contra el aeropuerto-, los agentes del TSA decidieron devolverle el bastón-láser. Más tarde, desde su casa, Mayhew dedicó a a sus 22.000 seguidores en Twitter lo siguiente: «Las palabras mágicas para el TSA no son ‘por favor’ o ‘gracias’. Es ‘Twitter’. El bastón llegó a casa» («Magic words to TSA are not ‘please’ or ‘thank you’. It’s ‘Twitter’. Cane released to go home»).
En el Aeropuerto insisten en que le devolvieron el bastón-láser en cuanto vieron que no suponía ningún riesgo para los pasajeros. «No por Twitter», subrayan. ¿Qué creo yo? Yo siempre fui de Chewbacca.
Esto es una historia real. Por cierto. Sucedió el lunes
En mi último cumpleaños me regalaron un peluche de Chewbacca. Es magnífico y estruchable. Cuando le aprietas la barriga se escuchan tres de sus clásicos gruñidos wookie. A mí me gusta charlar con él, interpretar que estamos de cervezas en la cantina de Moss Eisley, contando chistes y hablando de mujeres. Así soy yo. El caso es que el bueno de Chewie ha sido, durante toda mi vida, uno de mis fetiches ochenteros. Uno de esos personajes que incorporas a tu vida con un amor irracional y del que nunca te querrías separar.
Chewbacca es un secundario ejemplar. Su presencia no molesta y sus participaciones serán siempre recordadas. Además, de pequeño, cuando mis primos repartían muñecos para jugar los sábados por la tarde, siempre me daban el wookie. Desde entonces fuimos uña y carne. O uña y pelos. Bueno, ustedes ya me entienden. El caso es que los amigos de Hollywood han anunciado que van a realizar un documental sobre Peter Mayhew, el actor que interpretó al personaje y que tiene, por cierto, una vida alucinante.
El proyecto pretende recrear los años de rodaje de ‘Una Nueva Esperanza’, en 1977. Peter combinaba su trabajo como enfermero en un hospital con las sesiones infinitas de maquillaje y la propia grabación en el estudio. Kyle Newman, que realizó ‘Fanboys’ (la película sobre un grupo de frikis que viajan al rancho Skywalker), dirige un guion que está en la ‘lista negra’ de Hollywood. Una lista que contiene los mejores guiones nonatos de la industria norteamericana.
Yo me muero de ganas de verlo. Mientras, a estrujar peluches.