Una de las recompensas más bonitas de las historias es que, por muy conocidas que sean, por mucho que sean parte de lo clásico –o de lo olvidado–, la primera vez es igual para todos. Un placer salomónico que no pierde valor ni interés ni emoción por más que pasen los años. En muchas ocasiones requiere de un pago por parte del lector/espectador: aceptar la ignorancia. Ser honesto y admitir, sin complejos, que nunca has visto ‘El padrino’ o ‘Indiana Jones’; que nunca has leído ‘Cien años de soledad’ o ‘El señor de los anillos’.
Créanme, es mayor el disfrute del que se sabe ignorante y le pone remedio, que el falso orgullo del que prefiere parecer a ser. Y en esas me he visto yo, después de años asintiendo como un loco a los piropos del ‘The Sandman’ de Neil Gaiman. Pero empecemos por el principio: ‘Saga’.
Alguien me preguntó que si conocía ‘Saga’, el último tebeo escrito de Brian K. Vaughan. Puede que me sonara el nombre, pero no había leído ni una viñeta. Así que marché a la tienda de cómics y me hice con el primer tomo. Luego con el segundo. Y luego con el tercero. Los devoré a toda velocidad y, ahora, estoy esperando con ansia la publicación del cuarto tomo en España. En la introducción del primer número describen a la serie como «una mezcla entre ‘Star Wars’ y ‘Juego de Tronos’». Se queda muy corto. Es mucho mejor: una ópera espacial sobre la familia con unos personajes inolvidables (el dibujo de Fiona Staples es brutal).
Leyendo sobre la obra de Vaughan encontré referencias a Neil Gaiman (‘Stardust’, ‘Coraline’) y pensé que debería leer algo suyo. Opté por ‘American Gods’, una novela que celebra diez años desde su primera edición y que es un deleite para el amante de la fantasía más terrenal: ¿Y si los Dioses de la mitología clásica se enfrentaran a los Dioses modernos? ¿Atenea contra Internet, Odín contra la Televisión…? Por cierto, están preparando una serie de televisión que continuará lo narrado en la novela. Habrá que seguirle la pista.
Y eso me llevó hasta uno de esos títulos que todo amante de las historias debería guardar en su memoria y que yo, ignorante, no había leído: ‘The Sandman’. Me he comprado el primer tomo (lo están editando en España a una calidad excelente), publicado por primera vez en 1989. Ya lo he leído. Y sé lo que están pensando todos los que ya lo ha hecho: «qué envidia, la primera vez».