Ya sabemos lo que se tarda en incorporar un 3D cutre a una película rodada en 2D: 9 meses (y por cutre nos referimos a ‘Alicia en el País de las Maravillas’, ‘Ira de Titanes’ o ‘Los Vengadores’. Y no porque las películas sean más o menos acertadas, sino porque el 3D está insertado en postproducción, al contrario que ‘Avatar’ o ‘La invención de Hugo’, por ejemplo). Paramount Pictures ha decidido retrasar el estreno de ‘G.I.Joe: La venganza’, previsto para el próximo 29 de junio, hasta el 29 de marzo de 2013 para incluir la tercera dimensión en la película.
Hablamos de un despropósito en todos sus sentidos por dos puntos: Uno. ¿Gastas un pastizal descomunal en promocionar tu película (nada más que con el trailer que se proyectó en el intermedio de la Super Bowl de este año dejaron varios millones) para, a unas semanas del estreno, cancelarlo? Y dos. ¿Sabiendo que ‘G.I. Joe: La Venganza’ es carnaza para el espectador desprevenido, por qué no lo hicieron desde el principio?
Desde la empresa juguetera Hasbro también se congratulan de la inventiva de Paramount: «Cada vez es más evidente que el 3D es un reclamo para los aficionados al cine a nivel mundial y, junto con Paramount, se tomó la decisión de llevar a los fans una experiencia aún más inmersiva de entretenimiento», afirmó en un comunicado Brian Goldner, presidente de la entidad.
Lo curioso del asunto es que Jon M. Chu, el director de la cinta, insistió, antes de comenzar el rodaje, en que no quería 3D. Algo que no deja de ser intrigante si revisamos su carrera: ‘Justin Bieber: Never Say Never 3D’ y ‘Step Up 3D’; dos estandartes del arte moderno que prometían una segunda parte de los G. I. Joe apasionante. Y eso que Stephen Sommers (‘La Momia’) hizo una primera entrega bastante entretenida.
Sea como sea, Paramount, 3D mediante, espera mejorar los resultado de la primera entrega de la saga que en 2009 recaudó poco más de 300 millones, una cifra discreta para una cinta que acudió a la cartelera con la vitola de ser uno de los blockbusters del año.