Bryan Burke presenta ‘Star Trek: En la oscuridad’

Al igual que Varys, la araña, un servidor también tiene pajaritos escondidos donde nadie los vea. Pajaritos que me mandan mensajes, whatsapps y correos electrónicos que afilan colmillos y elevan las cejas en una claro, inconfundible y evidente gesto de pura envidia. Ayer estuvo en Madrid Bryan Burke (¿Bryan qué? Bryan Burke, productor de Bad Robot, una de las cabezas pensantes más buscadas en Hollywood: ‘Lost’, ‘Fringe’, ‘Star Trek’, ‘Misión Imposible’, ‘Super 8’, ‘Star Wars: Episodio VII’) para presentar los 28 minutos iniciales de ‘Star Trek: En la oscuridad’.

Hice prometer a mi pajarillo que no me desvelaría nada del argumento, así que lo resumió con un “francamente interesante” y un “muy prometedor”. Como el que no quiere la cosa, dejó caer que algunas giros de guión son previsibles y otros, seguro que no. “Habrá que ver el desarrollo de la película, pero a mí me ha convencido”, explica el pajarito.

La sala estaba llena, me dice, de periodistas, distribuidores y demás amigos del cine. Burke se presentó con sencillez y humildad: “Soy Bryan, de Bad Robot, muchas gracias por ver las películas que hacemos en un rincón de Santa Monica”. Aseguró a los asistentes que lo que iban a ver era el inicio del film de J.J. Abrams y que aún no estaba terminado. De esos 28 minutos -y de dos escenas extras que también proyectaron en Madrid- han salido todos los trailers que hemos visto hasta la fecha de ‘En la oscuridad’.

Sin embargo, lo que más me emocionó de todo lo que me contó el pajarito fue la pasión que Bryan Burke derrochó ante el público. La misma pasión de cualquier joven escritor deseoso de publicar su novela, firmar un guion y dirigir su primer gran proyecto. ¿Será eso? ¿Será ese, después de todo, el secreto del éxito? ¿Será la pasión y el respeto más severo a una vocación el secreto para ascender la montaña? ¿Será la pasión y la vocación la única nave interestelar capaz de llevarnos, con audacia, donde ningún hombre ha llegado jamás?