Anécdotas palomiteras (I)

Al otro lado del espejo estamos nosotros. Los raros. Los espectadores. Y, pese a que la historia que se proyecta sobre la enorme pantalla blanca esté repleta de matices, a veces se viven anécdotas magníficas en las butacas de la sala. Aquí tres ejemplos:

1.- La buena de Amanda se levanta en mitad de la proyección de ‘Héroes’ en busca de uno de los acomodadores del cine. “Disculpe -le dice con toda educación-, que parece que el sonido va mal… creo que con algo de retardo”. El tipo, muy cumplido, le dice que va a revisarlo con los técnicos. Unos minutos más tarde, el encargado entra en la sala, se agacha junto a su butaca y, con mucha delicadeza, susurra: “Verá usted, es que el audio es malo porque ésta es una película cutre española”.

2.- Nacho y Celia van al cine a ver ‘Déjame entrar’, remake estadounidense de una película de vampiros que contiene, como todos ustedes saben, un chorreo de escenas de casquería, sangre en batido y niños con aspiraciones maliciosas. En la fila de delante se sienta una familia: padre, madre y dos niñas que rondan los once años. La sucesión de las escenas ya descritas provoca risas nerviosas y culos que se menean sin saber donde mirar. Parece que lo de ‘no recomendado para menores de’ ya no se lleva. Al salir de la sala, una voz melosa sale de una infante que va a tener pesadillas: “Si es que ya no se hacen películas de vampiros como las de antes (se refería a ‘Crepúsculo’)”.

(Y, mi favorita y merecedora del ‘Primer Premio de Anécdotas Palomiteras’)3.- Juanra y sus colegas, como fieles adeptos a la saga que son, se preparan para que comience ‘Saw VI’. Si la de antes era sangrienta, ésta es lo de después. Salvaje. Pues otra vez: padre, madre, hermanos, primos y demás herencia entran en la sala cargados de palomitas, chocolatinas y refrescos. Juanra no se lo puede creer. La cinta arranca. La primera imagen ya es brutal. Mientras que los ojos de los niños se desencajan de sus cuencas y las mandíbulas caen como plomos, el padre, prudente, le dice al oído a su mujer: “Me parece que esto no es ‘Grú’”.

¿Conoces alguna anécdota divertida? ¡Escríbeme!