El temor de Grey

Si tuviera que escribir un personaje sensato y visceral, sabio y tajante, lo llamaría El Señor Hidalgo. El Señor Hidalgo es el nombre ficticio de un tipo inspirado en hechos reales con el que relataría la incipiente e infinita poesía que esconde cualquiera de sus monólogos. Y la inteligente y arrolladora dialéctica que derrocha en sus charlas con terceros. No todo el mundo tiene la suerte de escuchar un diálogo, en directo, de El Señor Hidalgo, así que me permito traerles una de sus perlas a este nuestro rincón:

-’50 sombras de Grey’ es un libro para remilgadas con sueños eróticos que no son capaces de realizar -dice El Señor Hidalgo.

-¿Cómo? -responde alguien.

-Que es pornografía barata.

-¿Pero lo has leído?

-¡Pues claro que lo he leído! ¿Por qué te crees que sé de lo que hablo?

-Bueno, los tíos veis porno…

-Eso, eso. Nosotros vemos porno, no lo leemos. Pero por lo menos no decimos que los actores son nuestros nuevos ídolos y que nos sentimos identificados. Somos realistas, ¡carajo!

-Pues para que lo sepas, algo tendrá cuando van a hacer la película.

-Hombre, tú verás. No van a hacer la película. ¡Ríete de Crepúsculo! Esto va a hundir las cifras de Crepúsculo, porque, básicamente, es lo mismo que los vampiritos pero aquí se atreven a chuscar a todo trapo.

No sabemos si El Señor Hidalgo tendrá razón o no. Lo cierto es que, hasta la fecha, Universal Pictures sólo ha anunciado que hay película y que la guionista será Kelly Marcel, responsable del texto de ‘Terra Nova’ (fracaso estrepitoso de la serie sobre dinosaurios) y del futuro estreno de ‘Saving Mr. Banks’, que contará cómo Walt Disney se hizo con los derechos de ‘Mary Poppins’ (dirige John Lee Hancock -‘The blind side’- y protagonizan Tom Hanks, Colin Farrell, Emma Thompson y Paul Giamatti, entre otros)

¿Y quién podría protagonizar la trilogía post-crespuculiana, según define El Señor Hidalgo? Suenan tres nombres. Para la parte femenina, Mila Kunis. Para la masculina, hay dos: Ian Somerhalder y Ryan Gosling. No creo que se sumen ninguno.